Es como una droga que perdió su efecto. Ya no me genera ilusiones, mas bien...desgano. No tiene nada de malo por el sencillo hecho de que ya hemos crecido pero aveces resulta tan tedioso saltar una etapa mas, un desafio mas.
Son sueños diurnos, momentos fugaces que completan tu día, sí eso es lo que son. Por eso cuando te miro se que mañana no estarás igual, no me mirarás igual, ni me hablarás igual. Y así duele menos.
El problema no es el momento pseudo-perfecto de hoy ni su recuerdo en mi memoria, el problema es el post. Si existirá un borrón y cuenta nueva, no tengo muchas dudas al respecto, ahora bien será un verdadero borrón? Esto me reencuentra con un Yo muy perdido, con un antes y un después. Era tan joven, tan firme.
Y ahora lo miro desde arriba, cansada y vieja, dos sensaciones que no se corresponden con mi edad. Es estúpido, sí. Pero lo entiendo perfectamente, casi con una ternura maternal. Un proceso natural de la vida.
Mi única preocupación o miedo por así decirlo, supongo, soy yo.
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