I lived my dreams today
And I have lived it yesterday
And I'll have lived it tomorrow

lunes, 26 de julio de 2010


Hace mucho tenía una amiga, una amiga llamada Cordura. Generalmente podían vernos caminar de la mano: recorriendo avenidas, plazas, manzanas, pequeños centros recreativos y muchos lugares más.

Pero un día me soltó la mano y salió corriendo, decidió emprender su propio vuelo. Intente alcanzarla pero como todos saben, mi estado físico es absolutamente negativo, y la perdí de vista.

A veces suele presentarse, intento atraparla, retenerla. Ella baila a mí alrededor burlándose, la muy escurridiza, de la lentitud de mis reflejos. Le ruego que se quede, pero ella se niega, piensa que voy a estar mejor sin su prudencia.

Escucho sus risitas y burlas viajar con el paso del viento y el tiempo. Es tan cínica que logra asquearme, pierde su encanto risueño y ese aire de juventud. Poco a poco se va envejeciendo y dejando morir, o no precisamente, la verdad no lo definiría así, quizás simplemente es arrastrada por la corriente como una más del montón.

1 comentario:

  1. es triste pero emocionante, como a cierta edad ver q la "madurez" desde distintas partes de nuestro ser se nos viene encima, y con miedo la dejamos entrar, pero sabemos a la vez q sera algo q disfrutaremos

    ResponderEliminar